Bueno, ya sabes que me encanta el cine, pero no solamente el actual. Me encanta devorar películas de todos los géneros y de todas las épocas. Me vuelven loca las historias. Por esa razón, hoy te voy a hablar desde este blog de una peli que vi hace no mucho y que, lo cierto, es que me encantó. Me refiero a The Watermelon Woman

The Watermelon Woman, un libro hecho película

Claro, como otros tantos, ¿no? Bueno, yo te voy a hablar de este. Me gustó mucho la peli, pero también me gustó mucho el libro. 

En el año 1996, la escritora Cheryl Dunye dio a luz a esta obra, una obra de ficción en la que una joven directora de cine lesbiana y negra, Cheryl, (interpretada por la misma Dunye) busca a una actriz maravillosa y negra que en los años 30 dio vida a un personaje de esclava negra «mamita» en el cine. En los créditos de la película, la actriz desconocida solo aparece como The Watermelon Woman, y eso hace mucho más complicado que Cheryl averigüe quién es. 

Es evidente que la protagonista está basada en la propia escritora y cineasta. Pero también hay personajes que se inspiran en familiares y en amigos, como por ejemplo, en su madre, Irene, que hace algún cameo en la cinta. Los trabajos de la cineasta se hacen llamar «Dunyementarios». Cabe señalar que en el momento de su estreno, The Watermelon Woman fue el primer largometraje de ficción que estrenaba una directora negra y lesbiana abiertamente. 

Una obra de referencia

En nuestros días, The Watermelon Woman es una obra de arte de referencia en el género. Es una comedia que contiene mucha ironía y mucho estilo, tanto, que es una obligación verla para aquellas personas a las que les gusta el cine de los 90. A principios del año pasado, en un clima de inseguridad y de protesta contra la brutalidad policial contra las personas de color en los Estados Unidos, Criterion la seleccionó como una de las cintas que mostraría en su sección de cine negro. Junto a ella, había otras cintas como Daughters of the Dust o Losing Ground, acercando estas películas al gran público. 

Desde que se estrenó esta película, la directora ha hecho y estrenado otros títulos, convirtiéndose en una directora de series de televisión dirigiendo episodios de algunas series muy populares en Estados Unidos como Dear White People, Queen Sugar o Lovecraft Country.

Pieza maestra del cine independiente

Aunque se trataba de Criterion, los estudios no querían saber nada del cine ecléctico y diferente a todo lo que fuera comercial. Si no eras un director blanco o tuvieras cabida en Cannes o en Venecia no había nada que hacer. No había nadie que la quisiera distribuir, a excepción de First Run Features, que tenían un acuerdo con Criterion. 

Por suerte, esta magnífica película ha llegado hasta nosotros y, sin lugar a dudas, merece la pena (y mucho) ver esta obra de arte. Sin duda, The Watermelon Woman es una cinta que toda lesbiana que se precie tiene que ver. 

¿La has visto?