Las relaciones entre lesbianas y bisexuales son comunes, porque no somos una comunidad excluyente. Ahora bien, sí que hay un elemento novedoso con respecto a las personas que solo son lesbianas. Creo que vale la pena que echemos un vistazo a esas cositas que pueden hacer más difícil el vínculo.

A mí se me ocurre que la confianza, como en todo, es fundamental, pero, sobre todo, si vuestro vínculo va más allá de una noche de discoteca, deberíais tener claros algunos puntos. Yo te sugiero estos: 

Definir claramente qué buscáis cada una

El primer punto es que tengáis claro qué buscáis. Y sería conveniente que, a estas alturas, ambas ya tengáis definida vuestra identidad sexual. Si vais a algo más que a un encuentro sexual esporádico, es necesario que esto esté claro. 

Lo he dicho muchas veces, pero no me cansaré de decirlo: por no tener claras las expectativas, podéis haceros mucho daño y hacérselo a las demás. Así que nunca está de más hablar, y sobre todo cuando la identidad sexual de vosotras no es la misma, aunque sí tenga un punto en común. Si es una relación afectiva, la honestidad es imprescindible en ambos casos. 

Al final, cuando hay relaciones adultas, la responsabilidad emocional es un punto irrenunciable. Así que este es un punto por el que hay que pasar, sí o sí, antes de ir más allá. 

Asegúrate de que ambas tenéis definidos vuestros gustos y preferencias

El proceso de reconocimiento de la orientación sexual no va al mismo ritmo en cada persona, esto es indiscutible. Pero, en el caso de la persona que sea bisexual, debe tener claro que realmente lo es y que no hay una preferencia a priori por ningún género. Esto es fundamental para que no haya en el futuro ningún desengaño que pueda generar malos entendidos. 

Cuando hay una relación afectivo-sexual, ambos elementos tienen que estar alineados correctamente. Y esto implica, necesariamente, un reconocimiento y aceptación mutua de la identidad de la otra persona. Es perfectamente posible tener un vínculo afectivo duradero, pero siempre que quede bien definido y establecido. 

Si la relación va en serio, priorizadla sobre las presiones externas

Desgraciadamente, la bifobia existe, y a veces, incluso desde dentro de la comunidad lésbica, no solo en otros ámbitos. Todavía existen demasiados prejuicios. Si el vínculo que vais a tener es profundo, quizás en algún momento notáis presión de parte de vuestro entorno. Debéis tener muy claro hacia dónde vais porque, en ocasiones, os encontraréis con algún sinsabor.

Evidentemente, las personas que os acepten tal y como sois serán las que valgan la pena como amigas. Y, si bien este es un momento muy clarificador, también exige compromiso mutuo, de ambas partes. Esto os permitirá sortear las presiones. Un vínculo sólido no debería tener grandes problemas, pero por eso hay que tener claro el desde dónde.

Las relaciones entre lesbianas y bisexuales pueden funcionar perfectamente, pero siempre que se sepa hacia dónde vais. ¿Eres lesbiana y has tenido una relación de pareja con una chica bisexual? ¿Cómo ha ido? Cuéntame tu experiencia en comentarios…