¿Te has preguntado alguna vez cuál es la orientación sexual de la población española? Pues podemos saberlo gracias a un estudio bastante reciente, de 2023.

Última encuesta del CIS

Según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre las relaciones sociales y afectivas, se encontró que el 90,9% de los españoles se sienten atraídos por personas del sexo opuesto, lo que refleja una predominancia de la orientación heterosexual en la población. En contraste, el 3,7% se identifica como bisexual. Es un porcentaje sorprendentemente elevado dentro de las opciones de orientación sexual minoritarias.

En cuanto a la orientación homosexual, el 1,9% de las personas encuestadas se declararon homosexuales. Como era de esperar, se trata de la minoría más pequeña en comparación con las otras orientaciones. Por último, un casi ínfimo porcentaje del 0,4% afirmó ser asexual, lo que significa que no experimentan atracción sexual ni desean contacto sexual con otras personas. En Lesbianas hemos tocado varias veces el tema de la asexualidad. Si te interesa saber más, puedes entrar aquí.

El porcentaje LGB ha aumentado en solo dos años

Pero indaguemos un poco más en los curiosos resultados de esta encuesta. Lo más llamativo es comprobar cómo las tendencias han cambiado en poco tiempo. Según los datos de la encuesta del CIS de mayo a junio de 2021, hubo variaciones notables en la autoidentificación de las orientaciones sexuales en la población española. Por ejemplo, el porcentaje de personas que se declaraban heterosexuales ha disminuido del 93,9% al 90,9%, lo que sugiere una apertura hacia otras orientaciones sexuales. Eso es una buena noticia, porque significa que mucha más gente se anima a salir del armario.

Por otro lado, el aumento en el porcentaje de personas que se identifican como bisexuales, del 2,3% al 3,7%, también indica una mayor visibilidad y aceptación de esta orientación. Del mismo modo, el incremento en el porcentaje de personas asexuales, del 0,1% al 0,4%, refleja una mayor conciencia y reconocimiento de esta identidad sexual. Estos cambios muestran que, en solo dos años, ha habido una evolución en las percepciones y aceptación de la diversidad sexual en la sociedad española en un corto periodo de tiempo.

Orientación según edad y sexo

El informe del CIS del año pasado profundiza aún más al relacionar la orientación sexual con el género, la edad, el nivel de educación y el tamaño del municipio de residencia. Vamos a ver los datos.

En cuanto al género, se observa una diferencia en la orientación sexual entre mujeres y hombres. El 89,6% de las mujeres encuestadas se identifican como heterosexuales, mientras que el 92,2% de los hombres se describen de la misma manera. Respecto a la homosexualidad, el 1,5% de las mujeres se identifican como lesbianas, en comparación con el 2,3% de los hombres gais. En cuanto a la bisexualidad, el 4,9% de las mujeres se declaran bisexuales, y solo el 2,4% de los hombres. Además, el 0,4% de las mujeres y el 0,5% de los hombres se identifican como asexuales.

En cuanto a la edad, se observa una tendencia hacia la heterosexualidad que aumenta con el paso de los años. En el grupo de edad de 18 a 24 años, solamente el 80,7% se identifica como heterosexual. Este porcentaje crece hasta alcanzar el 95,4% en la franja de edad de 55 a 64 años. Sin embargo, una vez superada esta edad, el porcentaje disminuye hasta el 84,6% en las personas de 75 años o más.

El entorno también influye

En cuanto al tamaño del municipio, aunque no se observa una tendencia clara, se pueden notar algunas diferencias. En municipios más pequeños, con 2.000 habitantes o menos, el 89,4% se identifica como heterosexual, mientras que no se registraron personas homosexuales en la encuesta. El 1,2% se define como bisexual, el 0,9% como asexual, y el 4,1% no proporcionó una respuesta clara.

Por otro lado, en localidades más grandes, como aquellas con una población de entre 50.000 y 100.000 habitantes, los datos muestran un ligero cambio. Aquí, el porcentaje de heterosexuales asciende al 92,8%, el de homosexuales al 1,2%, el de bisexuales al 3,1% y el de asexuales al 0,6%. Además, el 1,2% de los encuestados afirmó no estar seguro de su orientación sexual. Eso demuestra que sigue siendo difícil ser homosexual o bisexual en pueblos o en el mundo rural. De hecho, muchas personas LGBT deciden exiliarse a grandes ciudades para vivir con más libertad y lejos del juicio de un entorno lleno de prejuicios. Un aspecto en el que aún hay que trabajar mucho.

En cuanto al nivel de estudios, también se observan diferencias en la orientación sexual. Entre las personas con niveles de educación más bajos, el 86,4% se considera heterosexual, el 1,3% bisexual, el 1,2% asexual, y un significativo 5% no está seguro de su orientación sexual. No se disponen de datos sobre la homosexualidad en este grupo. Por otro lado, entre las personas con estudios superiores, las respuestas varían: el 91,5% se identifica como heterosexual, el 2,8% como homosexual, el 4% como bisexual, el 0,2% como asexual, y solo un 0,1% no está seguro de su orientación sexual.

¿Qué te han parecido los resultados de esta encuesta? ¿Te ha sorprendido?