La identidad de género y la orientación sexual son aspectos fundamentales de la identidad de una persona y pueden tener un gran impacto en su vida. La identidad de género es cómo una persona se siente y se ve a sí misma en términos de género, mientras que la orientación sexual determina el sexo que nos atrae. Estas dos cuestiones no siempre van de la mano, y pueden ser diferentes de lo que se espera en base al género asignado al nacer. Es importante respetar la identidad de género y la orientación sexual de la cada persona, y no juzgar a nadie por ella.

Identidad de género: ¿Qué es y cómo se relaciona con la orientación sexual?

Es importante tener en cuenta que la identidad de género y la orientación sexual son dos cosas diferentes, y no tienen porqué estar relacionadas entre sí. Una persona puede sentirse y verse como hombre o mujer y que le atraigan otras personas del mismo sexo, o sentirse y presentarse como mujer y atraída por personas del sexo opuesto. También es posible que una persona no se sienta ni hombre ni mujer, sino una categoría de género diferente, como no binaria.

Es importante no hacer suposiciones ni juicios sobre la identidad de género o orientación sexual de una persona basándose en estereotipos o expectativas culturales. Cada persona es única, y tiene derecho a ser respetada y tratada con dignidad, independientemente de que se sienta, gay, lesbiana o hetero. 

Además, es importante tener en cuenta que la identidad de género y la orientación sexual son cosas complejas y cambiantes, y pueden variar de persona a persona. No es necesario que alguien se etiquete de una determinada manera o se sienta atraído por un tipo específico de persona de forma constante. Lo más importante es respetar y aceptar a las personas tal y como son, sin juzgarlas ni discriminarlas por sus elecciones o identidades.

¿Cuáles son algunas de las orientaciones más comunes?

La orientación sexual es la atracción romántica o sexual que una persona siente hacia otras. Algunas de las orientaciones sexuales más comunes son:Heterosexual: atracción romántica o sexual hacia personas del sexo opuesto.

  • Homosexual: atracción hacia personas del mismo sexo.
  • Bisexual: hacia personas del mismo y del sexo opuesto.
  • Asexual: no siente atracción hacia ninguna persona.

La orientación sexual es una parte de la identidad de una persona y no es algo que una persona elija conscientemente. Es más bien algo que forma parte de quiénes son y puede ser diferente para cada persona.

Identidad de género y orientación sexual no son elecciones: ¿Por qué es importante recordar esto?
No son elecciones porque son aspectos fundamentales de la identidad de una persona y no son algo que una persona pueda cambiar voluntariamente. La identidad de género se refiere a cómo una persona se siente y se percibe a sí misma en términos de género, mientras que la orientación sexual se refiere a quién atrae alguien. Por ella, el colectivo LGTBQ+ sufre discriminación y prejuicios basados ​​en la creencia de que su orientación sexual y/o identidad de género es una elección. Esta discriminación puede tener un impacto negativo en la vida de una persona, incluyendo en su salud mental y física, y puede dificultar el acceso a oportunidades y servicios.

¿Qué piensas tú? ¿Es una elección?