No podemos negar que todas las personas que vivimos dentro del colectivo LGTBQ+ estamos viviendo un tiempo convulso y difícil. Por ejemplo, como lesbianas vemos cómo el auge de la derecha y la extrema derecha está intentando no solamente recortar los derechos que tanto trabajo nos ha costado conquistar. Además, lo que pretenden es meternos en un agujero y que nos quedemos todas quietas ahí, sin molestar. 

No quieren que hablemos, no quieren que respiremos si no nos casamos y nos acostamos con hombres. No quieren que existamos. Les molestamos. 

Sinceramente, pienso que eso no es más que miedo a lo desconocido. Es una tremenda ignorancia que no les permite crecer ni evolucionar como seres humanos, pero ese no es mi problema ni el el tuyo. Es es el de ellos. Nadie tiene derecho a decirme cómo vivir mi vida. 

Al margen de todo esto, hoy te quiero hablar de la conocida Ley Trans. Se trata de una ley que apoya a nuestras compañeras y compañeros trans. Pero está en un grave peligro al permitir el Gobierno actual que se lleven a cabo muchas enmiendas. 

La Ley Trans es necesaria

Dentro del colectivo siempre ha habido un vacío grande en lo referente a las personas transexuales. Está siendo objeto de enmienda tras enmienda. Pero, si no sabes de qué va la película, te diré que en ella lo fundamental es que una persona puede solicitar el cambio de sexo en el Registro Civil. Esto es lo que se conoce como autodeterminación, porque no es necesario aportar informe médico para acreditar su condición. 

Otra cuestión que elimina la ley es la necesidad actual de hormonarse durante dos años antes de solicitarlo. La ley, que en realidad hoy por hoy es proyecto de Ley, contempla los 16 años para completar el proceso de forma autónoma, y el periodo comprendido entre los 14 y los 16 para hacerlo con sus padres. Entre 12 y 14 años será necesaria la autorización de un juez, y con menos de 12 años no se puede cambiar el sexo en el registro, pero sí el nombre. 

Tantas enmiendas ponen la ley en riesgo

Las principales organizaciones afirman que es un peligro que el PSOE permita tantas enmiendas. Y no están seguros de que la ampliación de los plazos para presentarlas tengan motivaciones legítimas. 

En un comunicado unificado, aseguran que no se puede justificar la prórroga y advierten al ejecutivo que no se aceptará cualquier tipo de recorte de derechos, los cuales ya se pactaron para que la Ley Trans saliera adelante. Igualmente, también han declarado por medio de su portavoz conjunto que no se puede permitir que dirigentes del partido socialista vayan esparciendo por los medios bulos e información completamente falsa sobre los derechos de las personas trans. 

Sin lugar a dudas, la sociedad tiene una deuda con estas personas. Pero no solo con los transexuales, sino con todo el colectivo LGTBQ; y esta ley es una buena oportunidad para demostrarles que no son ciudadanos de segunda. 

¿Qué opinas tú?