Hoy traemos una triste noticia. Efectivamente, HBO ha decidido no continuar con la tercera temporada de Gentleman Jack, la serie lésbica de  Sally Wainwright. Una noticia que llega apenas un mes después de que la serie, coproducida por HBO y la BBC, finalizara su segunda temporada. Magnífica, por cierto.

Una pena, no solo porque era una serie fabulosa, también porque parece que su temática no ha interesado demasiado al público. ¿Cómo es posible? A todas nos parece inexplicable, siendo Anne Lister una mujer tan sumamente interesante. Pero la realidad es que ha resultado ser una de las series con menor audiencia de HBO de los ritmos años.

Por qué se cancela ‘Gentleman Jack’

Según el portal TV Series Finale, que recopila datos de audiencias, la segunda temporada comenzó con la mitad de espectadores que último capítulo de la primera temporada. La primera tanda de episodios tuvo una media de  390.000 espectadores por episodio, mientras que la segunda no llegó a los 100.000. También es cierto que han pasado dos años desde el estreno de la primera temporada, una espera que puede haber desmotivado a la audiencia.

La historia de Anne Lister todavía puede dar mucho de sí. Así que es probable que su creadora opte por iniciar una ronda de contactos para intentar que algún otro canal se interese en producirla. Pero mejor no crearse falsas esperanzas, por si acaso. Por ahora solo nos queda disfrutar de los 16 episodios de Gentleman Jack, y de la exquisita interpretación de Suranne Jones.

Anne Lister, nacida en 1791, es toda una referente en el mundo lésbico. Fue una mujer decidida, con un fuerte carácter, que vivió y gobernó su propia vida como quiso, libre del yugo de los hombres. La apodaron Gentleman Jack porque vestía de negro, y con ropas masculinas, que consideraba más cómodas. También por su actitud asertiva e independiente, que se consideraba más propia de los hombres.

Los diarios de Anne Lister

Sin embargo, por lo que ha pasado a la historia ha sido por sus completos y complejos diarios. Lister escribió durante toda subida, dejando unas 6.600 páginas de escritos, muchos de ellos redactados en un código secreto que mezclaba símbolos, latín y griego.

Anne Lister escribía sobre muchos aspectos de su vida, como sus viajes o sus negocios. Pero también relataba sus encuentros amorosos, y estos pasajes eran los que prefirió cifrar. Disfrutó de una ajetreada vida sexual, llena de amantes pasajeras y amores intensos como el de Ann Walker. De adolescente ya escribió sobre Eliza Raine, una compañera con la que compartió residencia. Usaba la palabra latina ‘felix’ para referirse a los encuentros sexuales. Escribía una letra Q en el margen del diario cuando quería remarcar una relación sexual. Además, inventó una propia jerga que solo compartía con sus conquistas. Esto fue muy habitual también entre los hombres gays de la época victoriana, que tenían que comunicarse en código.

Anne usaba la expresión “me duelen las rodillas” cuando quería manifestar su deseo hacia otra mujer. “Grabble”, una palabra antigua que significa excavar, hacía referencia a la penetración. “Ir a Italia” hacía referencia a una relación sexual completa. También se cree que usaba la palabra “beso” para hablar del orgasmo. Cuando escribía “incluir a cross” (provocar una cruz), estaba hablando de los momentos en los que se masturbaba.

Pero lo excepcional de nuestra ‘Gentleman Jack‘ no son sus diarios en clave, sino toda su vida al completo. Si esta cancelación te ha entristecido, puedes leerte sus diarios que están traducidos y publicados y puedes encontrarlos en cualquier librería.