Cada vez que salen parejas lésbicas en alguna serie con bastante repercusión, nos encanta, evidentemente. El problema es que la historia casi siempre está rodeada de drama y una buena dosis de toxicidad. Esto pasa también con las representaciones heterosexuales, al fin y al cabo el conflicto da más juego en la trama. El problema es que las películas y las series influyen en el concepto de lo que debe ser una pareja y refuerzo eso que llamamos amor romántico.

Parejas lésbicas tóxicas en series

Por eso es interesante analizar las relaciones de ficción y entender las dinámicas dañinas que se están reproduciendo, para poder reconocerlas en nuestra propia vida. Por eso, aquí te dejamos algunos ejemplos de parejas lésbicas que nos encantan, pero que mantienen unas dinámicas muy tóxicas. La mayoría tienen una atracción sexual explosiva o una conexión intelectual muy fuerte, pero aparte de eso, la relación no se sostiene.

Morello y Nicky en ‘OITNB’

Orange is the new black es una de las series lésbicas de referencia, con muchas historias entre mujeres. Una de las más complicadas era la de Nicky y Lorna Morello. El principal motivo es que Lorna ni siquiera se consideraba bisexual o lesbiana, y de hecho tenía un amor masculino fuera de prisión. Mantenía relaciones sexuales con Nicky porque estaba en la cárcel simplemente. Las dos se llevaban muy bien y tenían una bonita relación de amistad. Pero a Nicky le gustaba de verdad Lorna, y Lorna lo aprovechaba para tener compañía y no sentirse sola. ¿Cuántas relaciones en la vida real siguen este patrón? Demasiadas.

Marina y Jenny en ‘The L Word’

Al principio de The L Word ya vimos cómo se avecinaba el drama. Desde el mismo instante en el que Marina y Jenny se miraron. La chispa saltó de inmediato, pero en aquel momento Jenny tenía un novio con quien vivía, así que de repente era un mar de dudas. Y claro, pillarse de una chica que no lo tiene claro, no suele acabar bien, porque ahí hay dos personas en diferentes capítulos del libro. Efectivamente, la relación entre ambas empieza siendo super pasional e intensa, y acaba siendo de lo más dañina.

Lexa y Clarke en ‘The 100’

La pareja formada por Clarke y Lexa tiene una buena legión de fans, incluso a pesar de que la relación ya está rota. Fueron los dos personajes lésbicos más shippeados, por separado eran lo más, pero juntas, eran aún mejor. Pero a la vez tenían un rollo muy tóxico, ya que su relación comenzó con un fuerte antagonismo. Recordemos que eran enemigas, siendo cada una la líder, un grupo enfrentado al otro. Al principio había cierto respeto, pero una vez que se rompieron los límites, la cosa entre ellas se puso más y más complicada.

Cheryl y Toni en ‘Riverdale’

Otra de las parejas lésbicas más tóxicas de la pequeña pantalla. Todo por culpa de que las dos chicas tienen un montón de traumas y asuntos del pasado que resolver. Cuando están juntas se convierten en una olla a presión, y aunque saben que se hacen daño, siguen juntas. Es, sin duda, la definición perfecta de una relación tóxica.

Piper y Alex en ‘OITNB’

Por su puesto, la pareja protagonista de Orange Is the New Black se sostiene sobre la toxicidad. Vause y Chapman nos han dado momentos increíbles y nos encanta verlas juntas cuando las chipas saltan o cuando forman equipo y todo sale bien. Pero en realidad la relación de estas dos mujeres se basa en la atracción y en la adrenalina. No olvidemos como Piper se deja arrastrar por Alex al mundo de la delincuencia.

Eve y Villanelle, otra de las parejas lésbicas

Si hay una pareja lésbica tóxica por excelencia es la de la psicópata Villanelle y la policía Eve que trata de atraparla. En su posición de enemigas, ambas tienen sentimientos obsesivos por la otra, entre los que se mezclan el deseo, la admiración y el odio. Una mezcla bastante poco sana.

¿Qué opinas tú de estas parejas lésbicas? ¿Quieres mencionar alguna más que te haya parecido tóxica?