Crecer en un hogar donde hay un padre homofóbico puede provocar grandes daños emocionales. Utilizamos el término padre como masculino genérico. Aunque por cuestiones patriarcales, la realidad es que hay un mayor porcentaje de padres reticentes a aceptar la homosexualidad de sus hijos, en comparación con las madres. La buena noticia es que la homofobia se puede superar. Solo hace falta humildad, autorreflexión y capacidad para el amor incondicional.

Algunas señales de que sí eres un padre homofóbico

También puede que seas un padre homofóbico sin ser consciente de ello o sin ser capaz de aceptarlo. Por eso aquí te dejamos un listado de señales o actitudes que deberías cambiar si quieres mejorar la relación con tu hija o hijo, y de verdad buscas su felicidad.

Negar su orientación sexual

Dudar de la orientación sexual de alguien es negar su identidad. Decir cosas como que está en una edad confusa, que tiene dudas, que es una fase o que ya se le pasará es una forma de rechazo que hace mucho daño.

Hacer comentarios homofóbicos

Dejar caer chistes que ridiculizan al colectivo LGBT, o criticar a personas homosexuales mientras ves la tele, por ejemplo, se siente como un ataque indirecto. Tu hija o hijo se sentirá insultado y entenderá que su orientación sexual es motivo de rechazo por parte de sus padres. Detalles así pueden provocar daños en la autoestima.

Concertar citas hetero

Este punto es tristemente común. Hay padres y madres, que a pesar de estar al tanto que su un hijo o hija es homosexual, se empeñan en concertarles citas con personas del otro sexo. Esto es una gravísima falta de respeto, que expresa falta de aceptación. Además, trata la orientación sexual como algo que se puede revertir.

Entender su orientación como un fracaso

Algunos padres y madres todavía ven la homosexualidad como una especie de falla. Algunos incluso se excusan con eso de que ‘pobrecito, es que no quiero que sufra’ y de esta manera dan rienda suelta a su homofobia, cuando el mundo es hostil para personas LGBT por gente con este tipo de pensamiento. La orientación sexual es una característica de la persona que no debería ser más relevante que el color de los ojos.

Presionarle para que sea madre o padre

También es de padre homofóbico preocuparse por la descendencia de su hijo o hija. Esto, por motivos biológicos, es más frecuente con hijos gay, que de repente tienen que aguantar los dramas de unos padres obsesionados con seguir perpetuando su apellido y con ser abuelos.

Rechazar a su pareja


Evidentemente, esto ocurre también en relaciones heterosexuales aunque en este caso suele haber mayor predisposición por conocer a la pareja de su hijo o hija. Si el rechazo de los padres está provocado por ser una persona de su mismo sexo, estás dinamitando, en cierta forma, su relación. No siempre tienen que caerte bien, los novios o novias de tus hijos, pero se nota cuando la cosa va más allá de una incompatibilidad de caracteres.  

Estas son algunas señales que indican que claramente estás siendo un padre homofóbico. Puede que te cueste aceptarlo y necesites un tiempo para asimilarlo, hasta ahí todo bien. Pero negar o intentar cambiar a tu hija o hijo no va a hacer que la realidad sea distinta. Tu apoyo es imprescindible, así que por favor, sentaos a hablar si lo necesitas, y quiérele por encima de todo.