El riesgo de suicidio entre lesbianas, gays y bisexuales varía considerablemente en función de la intersección entre la identidad sexual y otros aspectos de la identidad, como el género, la edad y la raza/etnia, según un estudio dirigido por investigadores del Instituto Nacional de Salud Mental (NIMH). El estudio, que examinó los datos de una encuesta nacional representativa de adultos en los Estados Unidos, también mostró que lesbianas, gays y bisexuales son en general más propensos a experimentar pensamientos, planes e intentos de suicidio que los heterosexuales.


Los resultados, se publicaron en el American Journal of Preventive Medicine, e indican que la intersección de múltiples identidades sociales puede agravar el riesgo de suicidio para algunas personas lesbianas, gays y bisexuales.

¿Qué dicen sobre este riesgo de suicidio entre lesbianas y otra población LGTB?

Investigaciones anteriores han demostrado que, cuando se examinan como grupo, los adultos que se identifican como mujeres homosexuales, gays o bisexuales tienen tasas más altas de intentos de suicidio en relación con los adultos heterosexuales. Sin embargo, pocos estudios han investigado la variación dentro del grupo del riesgo de suicidio entre los adultos de los grupos poblacionales de los que hablamos.

El equipo de investigación planteó la hipótesis de que el riesgo de suicidio puede variar considerablemente según la identidad sexual, el género, la edad o la raza/etnia de la persona. Para poner a prueba esta hipótesis, los investigadores analizaron los datos de la Encuesta Nacional de Uso de Drogas y Salud (NSDUH). Se trata de una encuesta representativa a nivel nacional de adultos civiles en los Estados Unidos. Los investigadores examinaron los datos recogidos desde 2015, cuando la encuesta introdujo por primera vez preguntas sobre la identidad sexual, hasta 2020. El conjunto de datos recoge datos obtenidos de un total de 191.954 participantes, 14.693 de los cuales se identificaron como lesbianas, gays o bisexuales.

Como parte de la encuesta, los participantes informaron de su identidad sexual (heterosexual, lesbiana u homosexual, bisexual o no sabe) y de si habían tenido pensamientos suicidas o intentos de suicidio en los últimos 12 meses. Los investigadores examinaron estos resultados en relación con ciertas características individuales como la edad (18-24, 25-34, 35-64), la raza/etnia (blanco, negro, hispano, otra raza/multirracial) y el género (hombre, mujer). Los investigadores también tuvieron en cuenta ciertas características sociodemográficas, como el nivel de estudios y la situación laboral.

Los resultados del estudio

Cuando los investigadores analizaron la intersección específica entre la identidad sexual minoritaria y la raza/etnia, descubrieron lo siguiente: que las mujeres blancas y negras que se identificaban como bisexuales eran más propensas a informar de pensamientos suicidas. Al observar el cruce entre la identidad sexual minoritaria y la edad, los investigadores descubrieron que los pensamientos suicidas también eran relativamente más elevados entre las mujeres bisexuales del grupo de 35 a 64 años, en comparación con las mujeres lesbianas del mismo grupo de edad.Cuéntanos. ¿Conoces algún caso que ilustre este caso? ¿Qué edad tenía la persona? ¿Qué le aconsejaste hacer para solucionar su problema? ¿Pidió ayuda? Queremos que no lo cuentes en los comentarios de este artículo.