¿Cómo saber si estoy preparada para empezar una relación? Nos han inculcado que el estado natural e ideal de una persona es en pareja, y esto es el origen de mucha infelicidad. La presión de la sociedad por seguir un estándar y tener pareja, o la sensación de que la felicidad y la realización personal solo se puede completar cuando encuentras a tu media naranja, lleva a muchas personas a encadenar relaciones que terminan fallando por uno u otro motivo. Y si de cada ruptura se deriva un duelo, podemos darnos cuenta de que la vida sentimental de muchas no es precisamente un camino de rosas.

Motivos equivocados para empezar una relación

¿Qué tal si nos lo tomamos con calma y nos paramos a plantearnos si realmente es un buen momento para iniciar algo serio con alguien? Con demasiada frecuencia comenzamos una relación por motivos tan equivocados como los siguientes:

  • Por presión social o familiar
  • Para no sentirnos solas
  • Para tener sexo
  • Olvidar cuánto antes a tu ex, o intentar darle celos
  • Salir de la casa familiar
  • Para mejorar la situación económica
  • Mejorar la autoestima
  • Ser feliz

Cuando se inicia una relación basada en algunas de las razones mencionadas, el porcentaje de fracaso será muy alto. ¿Por qué? Porque para tener un vínculo afectivo saludable, sólido y estable con otra persona es imprescindible que antes de nada nos conozcamos a nosotras mismas, seamos conscientes de nuestros puntos débiles y fuertes, y hayamos desarrollado nuestra autoestima de forma autónoma. Solo así podremos amar libremente a otra persona con el único objetivo de compartir felicidad y aportarnos crecimiento mutuo. Esto significa que hay que saber esperar el momento adecuado, si no queremos sumar otro intento fallido a nuestra lista e ir perdiendo poco a poco la fe en el amor. A veces lo que falla es que simplemente nos precipitamos y no estamos preparadas.

¿Cómo saber si estoy preparada para empezar una relación?

Aquí te dejamos algunos puntos que indican que ya estás lista para iniciar una nueva relación de pareja:

  • Te aceptas tal como eres. Es decir, tu amor propio no depende de la opinión ajena ni de la aprobación de una pareja.
  • No vives en el pasado. Es decir, ya has superado a tu ex, y no la stalkeas, ni hablas mal de ella, ni la comparas con tus siguientes parejas. Es normal tener presente de vez en cuando la mala experiencia que pudiste vivir, pero solo en tanto en cuanto suponga una lección para evitar futuros errores. Cuando puedas recordar a tus relaciones pasadas sin rencor y quedarte con los buenos momentos, habrás dado un paso adelante y estarás lista para un nuevo amor.
  • Eres capaz de confiar de tu pareja. Es normal que las experiencias dolorosas nos pongan en alerta y a la defensiva, sobre todo si hemos sufrido. Encadenar relaciones puede provocar que el nuevo vínculo esté lleno de desconfianza y no seas capaz de bajar la guardia por miedo a que te vuelva a ocurrir lo mismo. Y no es para nada un buen ingrediente para que una relación funcione. Antes hay que sanar las viejas heridas.
  • Cuando asocias a la pareja con ideas como alegría, placer, crecimiento y aprendizaje. La pareja debe estar para lo bueno y para lo malo, pero más para lo bueno, teniendo en cuenta que la otra persona no es exclusivamente el paño de lágrimas, ni el saco de arena donde descargar nuestras frustraciones del día.
  • Si te sientes plena como persona por ti misma y tienes metas, objetivos y aficiones de manera independiente. Solo entonces estarás lista para compartir tu felicidad con otra persona y quizá construir sueños en común.

Cuéntanos tu experiencia. ¿Eres de enlazar relaciones antes de estar lista?