Por fin, tras la debacle de la política norteamericana que protagonizó sin tapujos el ex-Presidente Trump, los vientos de cambio llegan a la Casa Blanca y al Pentágono de la mano del Presidente Joe Biden. El más alto responsable de la política de Estados Unidos ha decidido colocar en puestos de mucha importancia en el Pentágono, el equivalente a nuestro Ministerio de Defensa, a dos mujeres de la comunidad LGTB, una lesbiana y una mujer trans.

Estas dos mujeres tienen mucha experiencia en lo referente a la lucha por los derechos del colectivo.

Una mujer trans y una lesbiana en el Pentágono

Las mujeres elegidas para el cargo en el Pentágono son Brenda Sue Fulton y Shawn Skelly. La primera es una conocida activista que ha luchado incesantemente contra el Don´t Ask, Don´t tell en el ejército, así como por el derecho de los transexuales a hacer carrera en las fuerzas armadas. El cargo que ocupará Fulton será Secretaria Adjunta de Defensa para Personal y la Reserva. En otras palabras, se convierte en asesora del personal militar de Estados Unidos.

Por su parte, Shawn Skelly es experta en Seguridad Nacional, una mujer trans que entró en el equipo del presidente tras la toma de posesión de su cargo. Ocupará el puesto de secretaria adjunta de Defensa para la preparación, un puesto de asesoría en el ejército y asuntos sanitarios. Esta mujer fue militar en la Marina durante 20 años, y también fundó la asociación de militares LGTBQ Out in National Security.

Biden está decidido a que haya igualdad en el país

Una de las primeras acciones del presidente Biden tras llegar al Despacho Oval fue la de derogar la ley promulgada por su antecesor, Donald Trump, en virtud de la cual no se permitía a los transexuales servir en el ejército.

Pero esta ley de igualdad no solo permite esto, sino que también tiene otras intenciones, como por ejemplo, hacer efectiva la protección contra la discriminación de todas las personas del colectivo, el apoyo a los jóvenes, evitar la violencia contra la comunidad. Igualmente, la nueva ley buscará el trato justo ante la ley y la promoción de los derechos y desarrollo de la comunidad LGTB.

Pero queda mucho trabajo todavía que hacer

Pero a pesar de que estas mujeres hayan ocupado un puesto de importancia en el Pentágono, algo que a todas luces es un hito en la política norteamericana, aún hay mucho trabajo que hacer. En el Senado, los demócratas y los conservadores están completamente igualados, ya que cada facción tienen un 50%. Eso podría dificultar la votación de esta ley. Sin embargo, en el caso de que se produjese un empate, la presidenta del Senado y Vicepresidenta del Gobierno dispone de un voto de calidad, mediante el cual la votación se inclinaría de uno u otro lado

Además, entre los mismos demócratas hay detractores de esta ley, como son por ejemplo, los Senadores por Virgina Occidental Joe Manchin y la demócrata de tinte conservador Kyrsten Sinema. Esto haría que fuese más difícil de ganar la votación, ya que serían necesarios 60 votos.

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