¿Tienen las mujeres actitudes misóginas y machistas? La respuesta indudable es sí, incluso las lesbianas, aunque sea algo difícil de reconocer. Pero la realidad es que todas hemos sido educadas en una sociedad patriarcal, y hemos integrado un montón de comportamientos que deberíamos revisar y tratar de erradicar. No solo por respeto hacia las demás mujeres, que ya bastante difícil lo tenemos. También para poder crear vínculos colaborativos y sororos que nos permitan luchar eficazmente contra este sistema opresor.

Actitudes misóginas que hay que erradicar

Pero hoy no nos queremos poner tan intensas, y nos limitaremos a exponer algunas de las actitudes machistas que con demasiada frecuencia se reproducen en las relaciones lésbicas.

Compartir información privada de exparejas

No, esto no se hace. Sí: da repelús escuchar al típico machirulo explicando sus conquistas, o compartiendo nudes de su ex en el grupo de whatsapp de los amigotes; pero la misma gravedad aplica a las mujeres. Hay quien piensa que, si se tienen estas conversaciones con otras mujeres la cosa tiene menos importancia, al fin y al cabo somos todas chicas. Pero estamos hablando del derecho a la intimidad, de dignidad, de respeto.

Menospreciar el rol pasivo

Para empezar, el cliché de que una es activa y otra pasiva, no deja de ser una reproducción de un estereotipo patriarcal basado en unos roles de género dañinos, como siempre, para las mujeres. Proviene de la idea de que el hombre penetra y por lo tanto es activo, y la mujer es el recipiente penetrado, que juega un papel pasivo. A la vez, el rol pasivo está asociado a una serie de características de personalidad muy limitantes. Es hora de desterrar estas ideas misóginas en las relaciones lésbicas.

Criticar la vida sexual de otras mujeres

Lamentablemente esta actitud no se ha superado, y aún parece que muchas nietas, conservan el mismo planteamiento que sus abuelas en lo que se refiere a la sexualidad. Y esto afecta a las mujeres en general, independientemente de su orientación sexual.

Acosar a otras mujeres

Aquí de nuevo puede parecer que la gravedad disminuye al circunscribirse la situación a un entorno femenino, pero entrarle insistentemente a una chica a pesar de sus negativas, sigue siendo una actitud machista y patriarcal, aunque sea una mujer quien la cometa. Al final todas estamos moldeadas por el género, criadas en la culpa, los cuidados y el afán por complacer, y eso es algo que debemos tener siempre presente cuando una mujer presiona a otra.

Caer en el mito del amor romántico

Ya hemos hablado aquí del daño que puede hacer en las personas el mito del amor romántico, una forma de relacionarse, a todas luces tóxica, basada en el poder, y absolutamente patriarcal. Las mujeres lesbianas, como parte de este mundo y este sistema, no están exentas de reproducir estos patrones dañinos que pueden derivar en situaciones emocionales nada saludables.

Así es amigas, nosotras no nos libramos de tener actitudes misóginas. Pero el primer paso para superarlo, es reconocerlo.