Ya lo había anunciado desde antes de llegar al poder y lo ha cumplido. La Casa Blanca reafirmaba hace unos días su compromiso con la reciente orden ejecutiva que firmó el nuevo presidente Joe Biden, en defensa de los derechos de las personas LGTBQ. En coherencia con esto, Biden trasladaba a los ciudadanos estadounidenses su intención de que todos los estudiantes identificados como transgénero, pudiesen elegir su género a la hora de participar en las actividades deportivas de sus centros educativos, sea con equipos femeninos o masculinos.

Joe Biden inicia la polémica en el mundo deportivo

Con esta propuesta se pretende eliminar la discriminación sexual en estos centros. Según las palabras de la orden ejecutiva, los niños tienen que tener la oportunidad de aprender sin la preocupación añadida de si se les negará el acceso a un determinado baño, al vestuario, o a un equipo deportivo. Una propuesta no exenta de polémica y que ha generado el rechazo de ciudadanos y colectivos.

Por este motivo, muchas personas preocupadas han trasladado sus dudas a la sala de prensa de la Casa Blanca. Allí, la portavoz de Biden tuvo que intentar resolver todas las inquietudes sobre esta propuesta de Biden. Fue Jen Psaki la encargada de asegurar que el presidente está convencido de que los derechos trans son derechos humanos. Y que ese es motivo fundamental de que firmase la mencionada orden ejecutiva. Por otra parte, la portavoz instó a la prensa a trasladar todas las dudas y cuestiones a las instituciones educativas en cuestión para saber con mayor concreción como iban a enfocar sus programas deportivos. Por lo que se da a entender que en cada centro podría enfocarse el tema de una manera diferente a pesar de las intenciones de Joe Biden.

Según datos publicados en USA Today, no hay relación directa entre los fondos federales y los centros educativos que permiten a chicas transgénero competir en deportes femeninos. La orden ejecutiva por tanto no afecta todas las instituciones. Como por ejemplo las escuelas K-12 (jardín de infancia) que se acogen a la normativa de cada Estado. O los atletas transgénero que se rigen según la normativa de la NCAA (la Asociación Nacional Deportiva Universitaria).

Compromiso con el colectivo LGTB

De esta manera Biden reafirma su compromiso con el colectivo LGTB. Cosa que ya demostró al designar a Rachel Lavine, una mujer transgénero, como subsecretaria de Salud. Además, el presidente firmó una orden para anular la prohibición, aún vigente, de que las personas trans pudiesen ingresar en el ejército nacional.

La oposición ha criticado enérgicamente esta orden ejecutiva, que según los peores pronósticos, podría destruir el deporte femenino. O como mínimo eliminar el concepto del ‘fair play’ e impedir el acceso a becas o a trofeos, a muchas mujeres deportistas. Esa fue la opinión que manifestó el senador republicano Rand Paul. Algo que ya trataba de exponer hace años la organización Save Women’s Sport a través de una carta que firmaron más de 300 deportistas profesionales, algunas de las cuales prefirieron ocultar su identidad por miedo a las represalias.

En España, la polémica sigue los mismos derroteros. Según la propuesta del Ministerio de Igualdad en la llamada Ley Trans, en el mundo del deporte profesional, se podría competir oficialmente sin necesidad de pruebas de verificación de sexo. En el borrador del anteproyecto de ley (que por ahora se encuentra en pausa), los trans menores de 16 años, o los que no cumplan con los requisitos para cambiar el sexo en sus registros, tendrán derecho a participar en eventos y actividades deportivas. En cualquiera de sus niveles, accediendo al equipo que considere, de acuerdo con su género sentido.

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