Ni hombres ni mujeres; tampoco travestis ni transexuales; ni homosexuales ni intersexuales, tampoco eunucos. Se definen más como ‘transgender’ y se les conoce como el tercer género. El término exacto es hijra, que es como se conoce a las personas transgénero en la India. Forman una de las comunidades más controvertidas, desconocidas y estigmatizadas.
Reconocidos por el Tribunal Supremo
El reconocimiento de la existencia de los hijras dentro de la sociedad india, es una de las contradicciones más de este fascinante país. Allí nació el Kama-Sutra, un manual sexual antiquísimo de referencia en todo el mundo. Pero, hasta hace muy poco, las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo estaban prohibidas y castigadas con penas de hasta 10 años de cárcel. Curiosamente, mucho antes de legalizar las relaciones homosexuales, el Tribunal Supremo emitió una sentencia por la cual se aceptaba este tercer género, por lo que millones de personas ya no tienen que elegir entre mujer o varón en los registros y documentos oficiales. Con esto se pretende atajar la marginalidad y la grave discriminación a la que se ven abocados los más de tres millones de personas que integran la comunidad de hijras.
Los jueces A. K. Sikri y K. S. Radhakrishnan destacaron en su sentencia que las personas transgénero son ciudadanas de la India, cuya constitución garantiza la igualdad de oportunidades y el derecho de los seres humanos a elegir su género. Además, en el fallo judicial se recomendaba a los distintos estados del país, así como al gobierno central, que se elaborasen modelos para brindar asistencia social a este tercer género. También se sugería que se llevasen a cabo campañas de sensibilización para terminar con el estigma social que existe en la sociedad con respecto a los hijras.
Mujeres transgénero y géneros neutros
Según los cálculos, en toda la India hay entre 3 y 4 millones de hijras, personas que se identifican con un tercer género que no es ni hombre ni mujer. La mayoría de los hijras nacieron con características sexuales asociadas al género masculino, pero se refieren a ellas mismas en femenino y se desenvuelven en la sociedad según los roles de género femeninos. También se calcula que en torno a un 10% de la población mundial marcaría la casilla de tercer sexo. En la Roma clásica se les aceptaba sin problema, pero tras la caída del Imperio en Europa Occidental fueron duramente perseguidos y torturados. La religión les consideraba como enfermos terribles y degenerados que se curaban con castigos físicos.
Aunque India lleva ventaja al resto del mundo en este sentido, Nepal fue el primer país del mundo que reconoció un tercer género en su censo en 2007. Más tarde se sumó Australia, añadiendo la calificación de «género neutro». Alemania fue el primer país de Europa que incluyó esta opción en los certificados de nacimiento. En otras regiones del mundo, como en los países mesoamericanos, existe la comunidad Muxe, compuesta de mujeres trans y hombres gay travestidos, lo que demuestra que la cuestión de la diversidad y la identidad de género se encuentra en cualquier lugar del mundo y trasciende cualquier época histórica.
¿Qué opinas tú de todo esto?
Ningún Comentario