Amén, hermanas. Pero no soy yo la que dice que las lesbianas son hijas de Dios, lo dice el Papa Francisco. Ese Papa argentino que está desafiando a los estándares obsoletos de la Iglesia. Bueno, todo lo que se pueden desafiar, claro…

Pues nada, que este hombre se ha propuesto hacer historia como líder de la institución eclesiástica mostrando públicamente su apoyo a una unión civil entre lesbianas o gays. Aunque te parezca una tontería, supone un punto de inflexión, sobre todo, si nos fijamos en la postura de los Papas anteriores.

Esto ha vuelto a abrir el debate de la moral sexual, porque las lesbianas somos hijas de Dios

De hecho, el actual Papa ha apoyado las uniones civiles para esas parejas del mismo sexo que quieran casarse. Su argumento es que las lesbianas son hijas de dios y tienen el mismo derecho que otras personas a tener una familia. También afirmó que nadie debería sentirse mal porque esto ocurra.

Como decimos, eso supone un cambio de rumbo muy importante dentro de la Iglesia Católica. Además, estoy segura de que esto va a hacer que se vuelva a abrir el debate sobre la moral y el sexo, y por supuesto, habrá muchísimos detractores que criticarán la pérdida de los valores cristianos.

Una institución anclada en el pasado

Todos sabemos que el simple hecho de que las lesbianas sean hijas de dios no significa absolutamente nada para que la Iglesia Católica, cristiana, apostólica y romana, niegue derechos fundamentales a personas. Durante años, siglos más bien, esta institución se ha negado a que las parejas de personas del mismo sexo tengan una protección legal. Un ejemplo muy claro está en Italia, ya que en este país las uniones civiles entre homosexuales se diferencian del matrimonio, que solo se reserva al hombre y a la mujer.

¿Una apertura al futuro?

Francisco ha hecho inclusivo a su papado. Trata de mostrar al mundo que las lesbianas son hijas de dios mientras lucha contra la merma del número de católicos y la presión para que la iglesia esté en sintonía con la sociedad moderna sin perder su brújula moral.

Desde su llegada a Roma, el Pontífice argentino ha mostrado repetidamente su voluntad de discutir temas como la comunión de los divorciados, la absolución de las mujeres que han tenido abortos y la ordenación de mujeres y la posibilidad de que los sacerdotes se casen. Al hacerlo, ha amplificado un cisma creciente dentro de la institución religiosa.

El último apoyo a los homosexuales ha sido una sorpresa para todos, también por la forma en que se anunció. El Vaticano aún tiene que dar su postura oficial. No obstante, el Papa ha defendido el matrimonio tradicional como una unión que permite procrear a una pareja. Si se confirma este apoyo, es un cambio importante que, sin duda, tendrá una serie de efectos secundarios imprevisibles.

La primera vez que se dice que las lesbianas son hijas de Dios

Pues sí, esta es la primera vez que un Papa defiende este argumento en toda la Historia de la Iglesia. Los Papas anteriores siempre han dejado esto en manos de conferencias episcopales nacionales. Si la versión es la oficial de la Iglesia a partir de ahora, todos los clérigos, cargos y fieles tendrán clara cuál es la postura en un tema muy polémico.

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