Hace unos días, concretamente el 3 de julio, se cumplían 15 años desde que España aprobaba el matrimonio igualitario, convirtiéndose en un país europeo pionero en cuanto a derechos LGTBI. De esta forma nuestro país se convirtió en el tercer país del mundo en permitir los casamientos homosexuales.

15 años desde el matrimonio igualitario

Esto sentó las bases para que la sociedad española fuese teniendo cada vez más en cuenta los derechos del colectivo y hoy día, España es uno de los lugares más gay-friendly del mundo. 

Pero además de unas leyes que incluyen a todas las orientaciones sexuales, España también es uno de los destinos LGTB más elegidos por los turistas de otros países. Miles de lesbianas vienen a contratar servicios de reproducción asistida cuando en sus países de origen no están permitidos. También es uno de los lugares preferidos para pasar las vacaciones de forma abierta y sin esconderse, y hacer uso de establecimientos y lugares especialmente gay-friendly. 

Antes de 2005 las lesbianas ya llevaban años formando familias, pero el reconocimiento legal lo ha hecho mucho más fácil y se ha normalizado todo de forma asombrosa, sobre todo si lo comparamos con otros países. IVI ha decido lanzar una guía muy completa y totalmente gratis donde hace un repaso de todo lo relativo a la maternidad en parejas lésbicas. Esta guía nos proporciona información general sobre los pasos previos a la maternidad en sí misma, como leyes, tratamientos, procedimientos legales, etc. También trata la forma en la que las familias han cambiado desde que sus madres han podido casarse. 

Familias más tolerantes

La guía se puede descargar fácilmente, y explica cosas como que desde 2018, aumentó el número de bodas entre mujeres con respecto a las parejas gays, que hasta aquel momento venían liderando el porcentaje de matrimonios. También ha aumentado en 241% las parejas que buscan un embarazo en clínicas especializadas.  Encontramos también historias personales con las que muchas familias pueden sentirse reflejadas, como preguntas tan repetitivas, agotadoras e irrespetuosas como: ‘¿quién es la madre?’. Y cuando se responde que las dos, la persona que quiere saber, aún insisten en saber más. Aunque el avance social ha sido muy grande, aún quedan algunas asignaturas pendientes, como educar a la sociedad en la aceptación de la diversidad familiar. Para trabajar en ello existen dos herramientas como son los cuentos infantiles donde podemos encontrar todo tipo de familias; y las asociaciones de familias. 

En la guía de IVI también nos cuentan que las familias lesbicas son mucho más igualitarias en cuanto a las labores domésticas y el cuidado de hijas e hijos. Además, les educan de forma más abierta con respecto a su libertad sexual, por lo que nunca tendrán que estar dentro del armario. La mayoría son heterosexuales pero crecerán sabiendo que su orientación sexual no es relevante, si no una característica más de cada persona como el color de los ojos, la altura o la forma de sus manos. Los hogares homosexuales tienden a educar en valores de respeto y tolerancia hacia la diversidad.