¡Qué horror! ¿Cómo podemos ser las lesbianas y demás miembros del colectivo LGTB tan horrosamente crueles? Definitivamente, vamos a llevar al mejor país del mundo entero a la extinción por culpa del homo-imperio.

Y es que Estados Unidos es un «homo-imperio» que está sometido a la «agenda de los tiranos LGBT». O al menos, eso es lo que afirma escandalizada Merritt Corrigan, que resulta ser la enlace adjunto de la Casa Blanca que hace poco trabaja en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).

Un homo- imperio a derribar

Pues eso es en lo que están empeñados desde el Gobierno norteamericano, en volver a hacer que el país sea una nación ejemplar, lleno de heteros blanquitos que se porten bien.

Corrigan es otra de las personas de confianza de Trump, que además de ser abiertamente homófoba es antifeminista. (Para echarle de comer aparte). Esta señora ha dicho que «el homo- imperio estadounidense no puede tolerar empresas que estén sometidas a la tiranía homosexual».Con esto quiere decir que rechaza las empresas que atiendan a los clientes del colectivo.

¡Antifeminista!

Carrigan también ha criticado al feminismo. En la revista británica The Conservative Woman escribió el año pasado que el feminismo duplica la carga y roba la posibilidad de cumplir aquello para lo que estamos programados: ser madres. Según esta señora, la planificación no es más que una excusa para asesinar a un niño que aún no ha nacido, y dice orgullosa que echa de menos la época en la que el cuerpo femenino era posesión de los maridos.

Y por si fuera poco, quiere que la mujer vuelva a la casa, donde tienen que estar y el lugar en el que somos felices y nos sentimos realizadas. Dí que sí, muchacha.

Hipocresía nivel Dios

Sin embargo, esta mujer que aboga tanto por estar en casa y ser la esposa perfecta, no ha pasado tiempo en ella. Por supuesto.

Antes de pertenecer al USAID, que teóricamente fomenta la democracia y un desarrollo de la economía fuera de las fronteras norteamericanas, fue diplomática en la Embajada de Hungría en Estados Unidos, y antes, miembro del Comité Nacional Republicano.

Durante su época en la Embajada húngara, llamó a Viktor Orban «campeón de occidente». A ver, el primer ministro húngaro es el líder de extrema derecha que ha implantado medidas en contra de las libertades, sobre todo, frente al colectivo LGTB. Un ejemplo, el que las personas trans no puedan modificar el género en documentación oficial para que no haya confusiones.

Más secuaces anti todo en el homo- imperio

Pero Corrigan no es la única, hay más personas en el homo-imperio. Bethany Kozma es la nueva subdirectora del personal de USAID, y es una conocidísima activista anti- transgénero. De hecho, condenaba abiertamente todas las medidas pro-integración de Obama.

Definitivamente, Estados Unidos no es el mejor país del mundo, al menos en lo referente a derechos de la comunidad LGTB. Por desgracia, hay muchas naciones en todo el globo que hacen lo mismo, que siguen la estela de la Administración Trump y que condenan cualquier avance en este sentido.

Aún queda muchísimo trabajo que hacer.