Si nos remontamos a principios del s.XX, el deseo lésbico implicaba que la mujer no gozaba de buena salud mental, y que debía ser internada en uno de los asylum de la época. Un manicomio, vamos.

Seguro que se te ocurren uno o dos nombres de lesbianas de esa época. Posiblemente, habrían sido encerradas en una institución psiquiátrica si alguien hubiese advertido que tenían deseo lésbico.

Antes de que existiese la palabra «lesbiana», el deseo lésbico era invisible

Y si no lo era, la mujer siempre era considerada como un ser inferior por dos motivos: por ser lesbiana y por sentir deseos por otras mujeres.

En muchísimos países de todo el mundo, la ley no reconocía a las lesbianas. Las relaciones sexuales entre mujeres no se consideraban delito porque las leyes anti homosexualidad siempre iban dirigidas hacia el sexo anal.

¿Pero por qué ocurría esto? Simplemente, porque no se contemplaba que las mujeres tuviéramos deseo sexual, y menos entre nosotras. Pero sí que hay documentación de lesbianas condenadas en 1841 por tener relaciones.

No obstante, el deseo lésbico se consideraba peor a nivel moral y religioso, era un pecado. En los años 50, las mujeres que no encajaban en el concepto de feminidad de la época estaban condenadas a estar en manicomios, donde se les aplicaba castigos que las mataban.

Ya en los 60 se consideraba una enfermedad que se podía curar, por lo que en lugar de sancionar, se intentaba curar. Según los expertos de la época, la mujer sufría trastornos de personalidad o neurosis.

En los años 70, se empezó a cuestionar este enfoque

No fue hasta el año 1973 el momento en el que la American Psychiatric Association descatalogó el deseo lésbico y la homosexualidad como enfermedad.

Hasta la fecha, y sobre todo en Estados Unidos, han existido iconos gays populares, como Ellen DeGeneres. En 1997 lanzó una sitcom que recibió un «aviso parental», y que luego se canceló. No fue hasta que comenzó su programa cuando empezó a tener más visibilidad. Por otro lado, la serie Buffy Cazavampiros, también trató el deseo lésbico, pero más tarde.

En 2004 apareció The L Word, serie de referencia para todas las lesbianas actuales. Ante el gran éxito, también aparecieron varias posteriormente, como Lip Service (2010), Lost Girl (2010), que abordaba el sexo bi, Wentworth (2013) y, también ese año, Orange is the new black.

De estar encerradas en un manicomio, a estar en una cárcel

No, no es un chiste. Es curioso cómo la temática carcelaria es en la que más presencia hay de lesbianas y de deseo lésbico.

¿Hay personajes lésbicos que sean similares a Cam y Mitchell en Modern Family? En este momento se produce un gran debate respecto a cómo tiene que representarse a las lesbianas en la tele. La mayoría de las series nos retratan como personas al margen de los convencionalismos, como condenadas a cárcel.

Particularmente creo que sí es necesario normalizar la condición de lesbiana y dar una imagen más acorde con la realidad. Las lesbianas somos personas normales y corrientes, que trabajamos, cuidamos de nuestra familia y pagamos nuestros impuestos.