Un terrible suceso de lesbofobia ha tenido lugar recientemente en Chiapas, según se ha publicado en El Heraldo de México. La noticia trascendió gracias al Observatorio Ciudadano de Derechos de la Población LGTB de la localidad. La asociación denunció que una mujer, de profesión policía, fue agredida y quemada por sus compañeros cuando ella se atrevió a hablarles de su orientación sexual. La asociación publicó unas fotos donde se veía a la agente con quemaduras en el torso y en los brazos.
Ante esta denuncia, la Fiscalía General del Estado procedió a detener a dos personas por intento de homicidio. Fueron identificadas como Jatziri Miriam “N” y Carlos Mario “N”. Según el fiscal encargado del caso, Jorge Luis Llaven Abarca, la agredida acudió con una compañera también policía al domicilio de los dos detenidos. Una vez en la casa una de las mujeres anunció que tenía dolor de estómago. Carlos Mario le ofreció un remedio que en lugar de aliviarle, hizo empeorar sus síntomas. En ese momento, Jatziri Miriam, la empujó fuertemente al suelo donde ambos la rociaron con alcohol y le prendieron fuego con una cerilla. En ese momento, la acompañante entró en la habituación. Al ver a su compañera en el suelo, trató de socorrerla, pero los agresores también la quemaron.
Ante los hechos, un juez de control de la región dio la orden de arresto de los imputados, también policías, que fueron llevados al penal de “El Amate”.
Torturas y vejaciones da dos lesbianas en Chile
Ahora, el Observatorio Ciudadano de Derechos de la Población LGTB y otros grupos activistas, están exigiendo que se abra una investigación por crimen de odio y violencia de género. También se está solicitando a la Comisión Estatal de los Derechos Humanos que se establezcan las medidas necesarias que garanticen la integridad física de las mujeres. Deseamos que este delito no quede impune. En un país y una región desgraciadamente conocida en el mundo entero por su violencia sistemática hacia la mujer.
La lesbofobia es imparable. A esta desgraciada tragedia hay que sumar una denuncia que interpuso el Instituto Nacional de Derechos Humanos de Bío Bío en Chile. La institución ha presentado, ante el Juzgado de Garantía de Coronel, una querella por las torturas a las que fueron sometidas dos jóvenes lesbianas. Las chicas fueron detenidas injustamente el pasado 12 de marzo. Después fueron víctimas de repetidas agresiones, en la vía pública donde las detuvieron, en el coche de la policía y después en misma comisaría. Las jóvenes dieron su testimonio explicando cómo los agentes de las Fuerzas especiales las sometieron a vejaciones y torturas físicas. Priscila P. y Monserrat P. detallaron en su denuncia que fueron ahorcadas, recibieron patadas y puñetazos en la cabeza y rociadas con gas pimienta en ojos y boca. También las obligaron a desnudarse y hacer sentadillas y las amenazaron con tirarlas al río.
Es terrible que esto siga ocurriendo, sin embargo los ciudadanos y las instituciones ya no van a dejar que estos crímenes caigan en el olvido. Aunque continúe existiendo una fuerte lesbofobia, las cosas están cambiando en cuanto a la protección de las víctimas, y esperamos que cada delito de odio sea castigado con todo el peso de la ley.
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