Personas trans en el ejército estadounidense podrían ser vetadas. En julio del año 2017, el presidente Trump anunciaba su propósito de prohibir que las personas transexuales entrasen en el ejército estadounidense.
Personas trans en el ejército estadounidense
Por suerte, no le está resultando tan sencillo. Las medidas que su Gobierno adoptó, han sido bloqueadas una a una por varios tribunales por considerarlas anticonstitucionales. También por tratarse de propuestas que atentan contra los derechos de los ciudadanos. En embargo, a principios de año, un tribunal de Columbia, dio la razón al gobierno de Trump apoyando el veto a militares transexuales. Afirmaba además que esta medida jamás de tenía que haber paralizado. De cualquier manera sigue pendiente de sentencia, por lo que su entrada en vigor no está garantizada. Son casi 15.000 militares trans los que sirven al estado en las fuerzas armadas.
El pasado mes de febrero, cinco militares transgénero, pertenecientes a distintas ramas del ejército nacional, comparecían ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes. Era la primera vez que se escuchaba en el Congreso, el testimonio directo de las experiencias de personas transgénero en servicio en el ejército. Estos afirmaron que su condición transexual no afectaba al desarrollo de su carrera militar. Pero en una audiencia aparte, el Subsecretario de Defensa y la Directora de la Agencia de Saludo de Defensa, compararon la identidad transgénero con una enfermedad. Con este argumento pretendían justificar el veto a personas trans en el ejército estadounidense.
Disforia de género como enfermedad
El comandante Blake Drenan habló de su éxito en su profesión. Narró su éxito en el cuerpo submarinista y su clasificación como oficial principal de suministros. Por su parte, la capitana Alicia Stehlik, afirmaba que una vez completada su transición, sus colegas la apoyaron y apreciaron su valor para ser ella misma. La calificaron como una inspiración para el resto del equipo. Otros como la sargento Patricia King, el suboficial Akira Wyatt y la capitana Jennifer Peace, también comparecieron para defender el derecho de los militares trans a continuar su servicio en las fuerzas armadas.
Jackie Speier, la representante demócrata por el estado de California, declaró que las medidas de Trump son medievales. Señalaba también lo injusto de que la Administración no sea capaz de agradecer la elección de las personas trans de ingresar en el ejército para velar por la seguridad y el bienestar de los ciudadanos. A pesar de los obstáculos y la discriminación que deben sufrir por los propios ciudadanos.
El Subsecretario James N. Stewart justificaba el veto diciendo que solamente está dirigido a los militares que parezcan disforia de género diagnosticada y no a las personas transgénero en general. Es decir que se admitía enrolar a aquellos que ya han pasado por toda su transición y que por lo tanto ya no padecen disforia de género. Sostenía que el proceso de transición incapacita profesionalmente a causa de las cirugías y las terapias que necesiten. Algo refutado por los representantes demócratas.
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