Las muertes por suicidio en jóvenes LGBT se sitúan en un preocupante 24%. El estudio ha sido llevado a cabo por la Adelphi University en Estados Unidos. Publicado en la revista ‘Journal of Adolescent Health’.
Muertes por suicidio en jóvenes LGBT
El estudio ha concluido que los adolescentes entre 12 y 14 años homosexuales, bisexuales o transexuales, son más vulnerables a cometer suicido que sus compañeros de orientación heterosexual. También se estableció que entre los adultos con edades comprendidas entre los 25 y los 29 años, el riesgo de suicidio se reduce al 8%. Ya se había documentado, en estudios previos, que el porcentaje de suicidios más elevado se produce entre los adolescentes LGTB. El objetivo es definir los factores que están contribuyendo a estas muertes.
Geoffrey Ream, uno de los autores de este estudio, explicaba que ya se sospechaba que los adolescentes y los jóvenes son mucho más vulnerables al estrés y la angustia que supone salir del armario en el ámbito escolar. Además de que el bullying es una realidad en todos los colegios, los jóvenes no tienen herramientas emocionales y psicológicas desarrolladas para enfrentar situaciones de este tipo. Por eso las muertes por suicidio en jóvenes LGBT son mucho más frecuentes.
Bullying e incomprensión familiar
Es estudio se centra en el periodo que transcurre entre 2013 y 2015, durante el cual se registró que el 24% de las muertes por suicidio lo cometían jóvenes LGBT. Esta investigación no se hizo con el objetivo de demostrar que salir del armario es complicado. Sin embargo los resultados obtenidos han mostrado una diferencia abrumadora entre el grupo heterosexual y el homosexual.
Concretando más los datos se concluyó que de 2209 suicidios:
- El 73% fueron hombres heterosexuales
- El 2,9% mujeres lesbianas
- El 2,2% hombres gay
- El 0,8% hombres bisexuales
- El 0,5% mujeres bisexuales
- El 0,7% hombres transgénero
- El 0,5% mujeres transgénero
Al comparar los datos de los hombres hetero con las mujeres lesbianas o bisexuales, ellas presentaban más del doble de probabilidades de tener intentos previos de suicido. Los hombres trans llegaban casi a cuadruplicar las probabilidades.
Las lesbianas y las mujeres bisexuales tenían más del doble de probabilidades de haber sufrido intentos de suicidio previos. Los hombres transgénero tenían casi cuatro veces más probabilidades. Las mujeres bisexuales presentaban una mayor propensión a los pensamientos suicidas. Con una tasa seis veces superior a la de los varones heterosexuales. Este grupo también parecen tener hasta 24 veces más propensión a padecer alguna enfermedad mental.
Uno de los factores que con más frecuencia contribuyen a este fatal desenlace, sobre todo en jóvenes y hombres gay, es el ambiente familiar. En las lesbianas y adultos, el factor principal son los desengaños amorosos y problemas de pareja. También se estimó que casi un tercio de los jóvenes LGBT que formaron parte del estudio, fallecieron mientras se encontraban en tratamiento psiquiátrico por alguna enfermedad mental.
Es importante recalcar que el suicidio no está provocado por la identidad sexual sino por la homofobia y transfobia con la que el mundo recibe a estos jóvenes. Por eso es tan importante seguir trabajando para educar a la sociedad en el respeto por la diversidad.
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