El colectivo Toxic Lesbian ha creado una pieza de arte interactiva donde la protagonista es la mujer. En la pieza aparecen relatos de mujeres que muestran la otra realidad de la calle Topete en Madrid. Estas mujeres nos cuentan sus historias desde sus lugares habituales de trabajo, abriéndonos los ojos a una realidad invisible.
Toxic Lesbian y su lucha por los derechos de la mujer
Toxic Lesbian surgió en 2005 dentro de un contexto que se puede definir como arte de acción político sobre género. Desde el año 2005 y hasta el 2009 el colectivo desarrolla diferentes obras de arte urbano. En el 2009 Toxic Lesbian llevó a cabo diferentes proyectos de arte público, y al mismo tiempo, desde el 2007 produce las obras de animación de Elena Tóxica, su fundadora.
Dentro de este marco, el colectivo decidió hacer algo respecto a la calle Topete en el distrito de Tetuán en Madrid. Esta zona, es conocida como el pequeño caribe por la cantidad de población dominicana que acoge en sus calles. Por otro lado, también es considerado un barrio peligroso donde las bandas campan a sus anchas.
El colectivo artístico Toxic Lesbian se propuso dar una nueva mirada a este distrito. Para ello, han creado una obra de net art con la que visibilizar a las mujeres que viven en la zona. Más concretamente, las mujeres que viven y frecuentan la calle Topete, en el barrio de Bellas Vistas.
Este barrio es un lugar muy estigmatizado por la violencia. La obra de Toxic Lesbian les da voz, haciendo que ellas cuenten su realidad, desde otra perspectiva. Una perspectiva que es más relacional y emocional. Una visión del distrito desde el punto de vista femenino, sus luchas, sus preocupaciones, sus sentimientos, su forma de sobrevivir día a día.
El Beso, un recorrido virtual por la calle Topete
La pieza interactiva que ha creado Toxic Lesbian, se llama El Beso, y es un recorrido virtual por los 350 metros de esta vía madrileña. La obra utiliza una tecnología similar a la de Google Maps, donde puedes avanzar, girar a ambos lados, e incluso mirar hacia arriba. Durante el recorrido, encontrarás hasta 72 relatos de mujeres sobre su vida y su experiencia en esta calle.
Aunque las mujeres de la calle Topete son las que sostienen la economía, las que trabajan, son los hombres los que dominan la calle. Muchos de los hombres que viven en este distrito están desempleados. Esto les lleva a pasar más tiempo en la calle, masculinizando su entorno. Las mujeres en cambio, trabajan todo el día, tanto fuera como en casa. Darles voz se hacía casi imprescindible, de otra forma, nos perdemos una realidad femenina que permanece en la sombra.
Para llevar a cabo la obra, el colectivo ha tratado de visibilizar y empoderar al conjunto de mujeres de la calle Topete. Por esto motivo, no sólo aparecen mujeres inmigrantes, sino también mujeres mayores, de entre 70 y 90 años, que llevan viviendo en Topete toda la vida.
Puedes ver la obra El Beso, a partir del 22 de septiembre en la calle Topete. Un proyecto de net art que no te puedes perder si estás por Madrid en esas fechas.
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