La fecundación in vitro es una gran alternativa para todas las lesbianas que desean tener un hijo. Es de hecho una posibilidad que pueden tomar las parejas o las mujeres solas que quieran vivir la experiencia de ser madre. Afortunadamente, hoy en día existen muchas facilidades. Sin embargo, es un proceso que puede resultar complejo en varios sentidos.

¿Qué pasos se dan en la fecundación in vitro?

En primer lugar, la fecundación in vitro supone uno de los cambios biológicos más rotundos a los que una mujer puede hacer frente. En efecto, el embarazo constituye por sí mismo una especie de «reto». El cambio hormonal que vamos a sufrir es tremebundo. Obvia decir que la fecundación in vitro y, en general, el embarazo son procesos de los que hay que estar convencida para acometerlos.

Paradójicamente puede resultar más sencillo para aquellas de vosotras que queráis hacer el proceso solas. El embarazo requiere, en el caso de hacerlo en pareja, una compañera que esté dispuesta a comprender lo que está sucediendo en vuestro cuerpo. Para empezar, por lo tanto, es necesario aconsejar armarse de toda la paciencia posible.

Es un proceso muy bonito que de hecho os unirá más. Para la que va a vivir el embarazo aconsejamos, igualmente, tranquilidad. Todo saldrá bien.

El método ROPA, el mejor para mamás lesbianas

En el caso de las mujeres lesbianas, en la fecundación in vitro el método ROPA es el más empleado. Consiste en que una de las madres dona el óvulo y la otra lo gesta. Es una preciosa forma de compartir la maternidad. El vínculo es muy estrecho en ese caso. La lesbiana que aporta el óvulo será estimulada previamente para generar más. Este proceso es exactamente igual que el de las mujeres que se prestan a donar sus óvulos. El proceso puede durar uno o dos meses y no es nocivo. Todo estará supervisado por la clínica que elijamos. Posteriormente se extraen los óvulos. Es una operación prácticamente sin peligro. Se aplica anestesia y durará unos treinta minutos, no más.

Con esos óvulos extraídos se hará un cultivo. Eso quiere decir que estarán en preparación 5 o 6 días antes de integrarlos en la madre gestante.

La mamá gestante será sometida  a un proceso hormonal distinto. En su caso se tratará de preparar el endometrio. Se trata de prepararnos para que el óvulo implantado arraigue y pueda prosperar el embarazo. Después del proceso haremos un test de embarazo para conocer la feliz noticia.

El método ROPA tiene un precio muy similar al de cualquier proceso de fecundación in vitro. Es decir, ronda entre los 4000 y los 6000 euros. No es un proceso barato. Hay que entender que por ese precio estaremos obteniendo la que, con toda seguridad, sea la mayor gratificación de nuestras vidas. Si estáis pensando en tener un hijo, sin duda es bastante asequible.

Sabéis que en nuestro blog podéis encontrar de hecho algunas clínicas especializadas en el proceso. La guinda podría constituirla un matrimonio. Si queréis obtener información sobre los pasos que hay que dar para organizar nuestra boda, consultad esta entrada del blog. Por todo lo demás, os damos la enhorabuena si finalmente os decidís por la fecundación in vitro. Esperamos que seáis muy felices y recordad tener paciencia a lo largo de todo el proceso. Muchas veces no ocurre a la primera. Sin embargo, no hay que desesperar.