Hoy hacemos un post muy especial dedicado a un barrio LGTB. Decimos que es especial porque queremos dedicarle esta entrada a todas nuestras amigas y seguidoras argentinas. Nos consta que son muchas, al igual que todas las que nos siguen y participan a través del otro lado del charco. Este blog es también vuestro, de todas en concreto. Esperamos que os haga tanta ilusión como a nosotras dedicarle un artículo a este barrio y de paso a la bella ciudad de Buenos Aires. Esperamos que alguna de vosotras viva por allí y que no sea en ese caso demasiado severa si cometo algunos errores.

¿Qué tiene de especial?

La ciudad de Buenos Aires cuenta con 48 barrios, nada más y nada menos. De entre todos ellos, el más pequeño pero el más chillón es San Telmo. Está enclavado entre los barrios de Boca, Montserrat y Barracas. Tradicionalmente ha sido un barrio obrero, fundamentalmente poblado por gente que trabajaba en el embarcadero. Es, como cualquier barrio LGTB de cualquier ciudad del mundo el barrio con más vida y movimiento. En el caso de San Telmo se debe a la calidad de su gente (el colectivo LGTB destaca como personas de especial renombre, fama, talento e importancia) y a la naturaleza de sus actividades.

Hasta donde sabemos, desde los últimos cuarenta años, más o menos coincidiendo con el inicio de la etapa democrática en Argentina (en esto es muy similar a lo que ocurrió con Chueca en España) sufrió un verdadero revulsivo y para bien. Desde entonces, numerosos artistas (pintores, escultores, bailarines, escritores, etc.) decidieron trasladarse a él. Pronto todo el barrio se contagió de un espíritu bohemio que la gran calidad de su patrimonio acrecentó. En efecto, es un barrio histórico de Argentina que merece la pena por su belleza.

¿Qué hacer en este barrio LGTB?

Para empezar recomendamos un paseo por la calle Florida o la calle Defensa. Especialmente los fines de semana son dos paseos peatonales muy concurridos. Gran parte de Buenos Aires sabe de buena tinta que este barrio es un gran lugar para pasar la tarde y por supuesto la noche. Para empezar, es muy recomendable perderse por sus puestos de antigüedades y artesanía. Allí podremos disfrutar de un colorido espectáculo a la luz de Buenos Aires.

Los viernes por la noche debemos destacar la discoteca María. Es una discoteca de ambiente sólo para lesbianas. Este barrio LGTB ofrece muchas posibilidades. Más para aquellas de vosotras que sientan especial predilección por las chicas argentinas. El acento y esas cosas, dicen. Si no queréis esperar al viernes para daros el gustazo, los miércoles abre otra sala LGTB. Aunque se admiten colectivos de todas las orientaciones sexuales las lesbianas han acaparado claramente el local. Este sitio, de un ambiente inmejorable promete hacer las delicias de todas las visitantes.

También debemos hablar del Bach Bar. Espontáneamente se ha convertido en un bar para lesbianas en Buenos Aires. Por último, y para cerrar el círculo del homenaje sugerimos visitar el Chueca. Es un restaurante de ambiente. Las lesbianas se sentirán aquí como en casa: hasta el título ya nos lo deja claro en un guiño al emblemático barrio LGTB de Chueca, en Madrid.