Queremos aportaros una guía para llevar a cabo los trámites para adoptar un niño. Seguramente muchas de vosotras os habréis planteado u os estáis planteando actualmente dicha opción. Por ello, hoy queremos aportaros algunas pautas y consejos sobre la cuestión. El tema de la inseminación artificial por el método ROPA será tratado en un post que aparecerá dentro de poco así que, si os interesa, os recomiendo que estéis atentas.

Lo primero de todo es averiguar si en nuestro país los trámites para adoptar un niño pueden iniciarse para el caso de parejas homosexuales. En el caso de España debemos decir que sí es legal adoptar para parejas que estén casadas. Desgraciadamente, la ley española sólo contempla el derecho de adoptar, siendo pareja de hecho, exclusivamente para uniones heterosexuales.

Dependiendo de la información que consultéis, a veces os aparecerá que dicha excepción para las parejas de hecho no se contempla para el caso de lesbianas.

Particularmente, he seleccionado la información fiándome más de fuentes como abogados y juristas antes que blogs de actualidad sobre el tema LGTB. La razón de la discrepancia está en que el debate todavía hoy está candente.

Concretamente se inició cuando España fue pionera en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo. Además, fue la tercera del mundo en darles derecho a la adopción.

Pero como las cosas de palacio van despacio, no existe un criterio uniformado para el tema de las parejas de hecho. Personalmente considero más recomendable fiarse, en este caso, del criterio más conservador y reservarlo a matrimonios.

Y como queremos ofrecer una información lo más completa posible, también anticipo que dentro de poco haremos un post dedicado al tema de matrimonios entre mujeres. Antenas puestas, pues.

Cómo adoptar un niño

El primer paso para adoptar un niño o niña es ponernos en contacto con el servicio de protección de menores para comunicar que queremos adoptar a un niño.

En segundo lugar debemos obtener el certificado de idoneidad. Esto, en efecto, es un proceso en el que se juzga si estamos capacitados para adoptar. Se contemplan aspectos como la capacidad económica, los hábitos, el expediente psicológico o los antecedentes penales. También nos harán entrevistas personales para que informemos de qué clase de vida va a llevar el niño. Dónde va a vivir, qué clase de hogar va a tener, cuánto tiempo vamos a dedicarle, etc.

Una vez superado este proceso llega la recogida del bebé o menor. Esto, como ya habréis adivinado, lleva (exactamente igual que el resto de procesos) mucho tiempo. No es, ni mucho menos, una cuestión de semanas. De hecho, lo normal es que pueda alargarse por más de un año, o varios. Concretamente, la media de tiempo es de tres años, nenas.

Si estáis pensando en adoptar a un niño extranjero, la cosa se complica. Los trámites harán todo más tedioso y los plazos, en consecuencia, se alargarán.

Otro criterio que se tiene en cuenta a la hora de adoptar es ser mayor de 25 años y superar en 14 años al adoptado.

En definitiva, es una agonía más que un proceso. A la larga merece la pena, pero requiere mucho tiempo adoptar a un niño. Por ello, la mejor opción para las mujeres lesbianas sigue siendo la inseminación artificial, de la que hablaremos dentro de poco.