Historias de 0 def

Ona se levantó y se le acercó mientras ella continuaba estirada, con los ojos cerrados, fumando otro cigarrillo. Había dejado de jugar con la cajetilla y se dedicaba a arrancar mechones de hierba con su mano izquierda.

-Hola, soy Ona.

Carmen entreabrió los ojos y colocó su mano a modo de visera sobre la frente.

-Me habían dicho que venía una estudiante española. ¿Eres de Barcelona, no?

-Sí, ¿y tú?

-También. Soy Carmen.

Entonces se levantó y se colocó frente a ella. Ona percibió una mezcla peculiar de olores resultante de la unión entre el aroma de Eau Sauvage, de la hierba recién cortada y del tabaco negro. Carmen sopló y apartó el flequillo que cubría su ojo derecho mientras la observaba con detenimiento. Ona se rió.

-¿Qué te hace tanta gracia?-le preguntó Carmen.

-Pareces Terminator inspeccionando humanos y objetos terrícolas.

-Sólo te estaba mirando.

-Me estabas retratando con tu visión de rayos infrarrojos.

Carmen se rió.

-Perdona. No quería molestarte.

-No importa, pero por un momento, entre tu cazadora y la fotografía que me has hecho, he pensado que tú eras Schwarzenegger y yo Sara Connors.

-Eres más guapa que Sara Connors.

Ona no respondió, simplemente sintió que sus mejillas ardían.

¬-¿Te estás poniendo roja? ¿Nadie te ha dicho que eres guapa? Pues lo eres, confía en mí. Te lo juro-le dijo Carmen.

De repente, Mister Haddon abrió una ventana y se dirigió a ellas con un grito huracanado.

-In Englishhhhhhhhhhhh.

Carmen levantó el brazo, medio saludándolo, medio tranquilizándolo.

-Don`t worry. Sorry, sorry.

Él cerró la ventana. Ellas continuaron charlando. Cuchicheando en castellano.

-Tendremos que disimular. Se pone como un energúmeno cuando escucha alguna palabra que no sea en inglés.

-¡Menudo sargento! –dijo Ona

-Es pura fachada. Supongo que su hijo, que es el dueño, le pide que nos vigile y todas esas cosas.

-Pensaba que el colegio era de él.

-Lo fue. Ahora es de su hijo, pero él se dedica a atender a los alumnos, a darles la tacita con su nombre, a controlar el examen escrito cuando llegan los nuevos…a vigilar que se hable inglés todo el día, en fin, esas cosas. ¿Sabes que conoció a la de Memorias de África?

-¿A la de los kikuyus?

-Vivió en Kenia muchos años y allí la conoció, y ¿sabes una cosa? Creo que la conoció en el sentido bíblico de la palabra.

-No te entiendo ¿Qué quieres decir?

-¿No sabes lo que quiere decir, en el sentido bíblico de la palabra? Pues que se la folló.

-¿Y tú cómo lo sabes?-preguntó Ona.

-Porque esas cosas, se saben. A la de los kikuyus se la folló el que se estrelló con la avioneta, el marido y creo que Mr. Haddon también anduvo por el cafetal y escuchó música clásica en aquel gramófono y después le dijo, Karen, chata, me gustas, ¿qué tal si nos metemos en la camita tú y yo y te como un poco el coñito ahora que tu marido no está y el del avión tampoco?

Ona se rió.

-¡Que cosas dices! No creo. Ella regresó cuando Robert Redford murió.

-Sí, pero antes de volver, al tipo lo enterraron y Mr. Haddon la acompañó al funeral, lo que pasa es que en la película su personaje no sale. Así es que eran colegas, muy colegas… y ella le lloró en el hombro… y eso a un tío le pone mucho, y entre lloro y lloro, ¡allá que te vas!, la empotró contra una pared y después la tumbó en la cama y en fin, cuando ella se dio cuenta, estaba follando con él mientras el gramófono seguía sonando-continuó Carmen.

– Pero, ¿cuántos años tiene Mr. Haddon?

-Setenta y algo, creo.

-Por favor, cuando murió el de la avioneta ella debía tener unos 40 años. ¿Me estás diciendo que aquella mujer cuarentona se enrolló con un chaval de 20?

-¿Y por qué no? Igual a la de los kikuyus le ponían los jovencitos. De hecho, ya te he dicho que suprimieron ese personaje de la película y ¿por qué lo hicieron? por ese motivo, porque si no, ella hubiera quedado como una asaltacunas.

-Te lo estás inventando.

Carmen se rió.

-¿No te lo crees? Yo creo que es un puntazo…él…jovencito… inexperto, cayendo en brazos de aquella mujer madura….

-Me estás tomando el pelo.

-Puede que sí, o puede que no. De todos modos, ¿a qué mola imaginarse a Mr. Haddon follando con Meryl Streep?

De nuevo Mr. Haddon emergió de una de las ventanas del edificio del colegio.

-Ouna and Caamen, in englishhhhhhhhhhhhhh!

A las dos de la tarde, los alumnos entraron en el colegio. Tan solo una clase más y podrían irse a sus casas. Ona había estado examinándose por la mañana junto a los otros nuevos estudiantes pero aquella tarde tendría su primera clase.

-¿En qué grupo de conversación estás?-le preguntó Carmen.

-En el básico. Pero en gramática estoy en un grupo adelantado.

-¡Qué nivel de inglés más raro, tía!

-Ya. Es que me da mucha vergüenza hablarlo.

-Bueno, ya se te quitará o si no morirás en un rincón sola, olvidada, como un pajarito… ¿En qué grupo de gramática te han puesto?

-En el B-1

-Pues no coincidimos. Yo estoy en el A-2. Cuando yo empecé en junio estaba un poco mejor que tú en conversación, pero tampoco mucho más. Y de gramática, andaba peor que tú. Así es que si se te quita la vergüenza pronto hablarás mejor y te pondrán en un grupo de conversación más alto y puede que hasta estemos juntas.

-No sé.

-Seguro. Yo he mejorado mucho en solo 3 meses-le dijo Carmen.

-Estaría bien que coincidiéramos.

Carmen y Ona subieron las escaleras que las llevaron al segundo piso. Cada una se dirigió a una clase diferente, cada una en un extremo del pasillo. Antes de desaparecer tras las puertas respectivas, Carmen la llamó:

-Ona

-¿Qué?

-Nada. Espérame cuando salgas o…te perseguiré por todo Éxeter hasta que dé contigo…tipo Terminator y Sara Connors.

Ona le sonrió. Luego ambas empujaron las puertas de sus aulas y desaparecieron detrás de ellas.

(Continuará el viernes próximo)

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