No teníamos especial interés en seguir este año el festival de Eurovisión, pero durante los ensayos se supo que este 2013 el golpe de efecto de la delegación de Finlandia -hoy en día no sé si cuenta más el tema o la puesta en escena que uno lleve al Festival- era un piquito lésbico para cerrar el tema «Marry Me» («Cásate conmigo») que la cantante Krista Siegfrids, ataviada con un vestido de novia, se marcaba con una de sus bailarinas y con el que de paso quería apoyar el matrionio gay no permitido aún en Finlandia. Sabiendo esto y que la televisión turca, por ejemplo, se había negado a retransmitir el festival por ese pequeño lesbimomento, Eurovisión nos picó la curiosidad y, aunque muy por encima, acabamos siguiéndolo.
¿El resumen?
Ganó una de las favoritas, Dinamarca -bueno más bien arrasó- con Emmelie De Forest defendiendo el tema «Only teardrops», El Sueño de Morfeo, que representaba a España, se quedó en penúltima posición con solo 8 puntos (servidos por Albania e Italia), por delante solo de Irlanda, y Krista finalmente no se saltó el guión y hubo beso. Le costó la antepenúltima posición -aunque el tema no estaba tan mal- así que desde aquí le lanzamos un ¡ole Tú, Krista!
Os dejamos con la actuación de Krista en la seminfinal del viernes…
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