Y por fin el momento más esperado de nuestras vacaciones por la costa oeste de USA y Canadá, tras esa visita al estudio de la serie: Esa colada que nos pegamos en el rodaje de la sexta temporada de L Word.  ¡Y es que fue una colada total! Como ya os avanzamos en el anterior post, tras el chivatazo sobre el rodaje del día siguiente en el downtown de Vancouver, nos dispusimos a hacer un reconocimiento de la zona ipso facto. Y cuál fue nuestra sorpresa al ver que efectivamente la zona donde se suponía que el equipo de producción iba a trabajar estaba llena de cartelitos que, en lenguaje codificado, así lo indicaban. Estaba claro que al día siguiente iba a haber movimiento, así que buscamos un párking donde dejar la furgo muy, muy cerquita de la zona, para movernos a nuestras anchas 😉 

El caso es que al día siguiente preparamos el equipo de reporteras tribuletas y justo cuando nos estamos acercando a la zona cero, paradas en pleno semáforo en rojo, me giro ¡¡¡y veo por la ventanilla el mini de Alice descapotable con Ilene Chaiken dentro!!!  Sí, sí con Ilene Chaiken dentro allí, tan tranquila esperando que se pusiera verde el semáforo mientras consultaba unas notas. ¡Vaya flash! Y menos mal que no me fallaron los reflejos y pude sacarle por lo menos estas dos fotos 😉 

Nos dio tiempo a poco más: bajamos la ventanilla y la saludamos. Ilene nos dedicó un «hello» muy amable pero el semáforo se puso en verde, ella nos adelantó y se paró en un hotel a nuestra derecha. Nos pilló tan de sorpresa que seguimos nuestra ruta hacia el párking. Estaba claro que los datos del rodaje eran correctos. Qué fuerte, nos habíamos topado con Ilene en pleno Vancouver. Ja, ja y sólo eran las 9.30 de la mañana más o menos… 😉

El subidón que nos dio con el encuentro ya ni os lo cuento, ja, ja. Bueno el caso es que nos dirigimos a ese párking que ya teníamos localizado, cuando de repente nos encontramos con que medio párking está cerrado al público. ¿El motivo? Nuestro aparcamiento era también el que el equipo de producción  de The L Word había elegido para aparcar todas las caravanas del rodaje: la caravana de maquillaje, la de vestuario, la de las estrellas de la serie… Sí, sí las roulottes de las actrices también estaban allí mismo justo delante de nuestra furgo. Sin cortarnos un pelo entramos en el párking cual Vancouver citizens, pagamos nuestro tícket y de allí ya no movimos la furgo en todo el día.

 

Y entonces llegó el primer dilema de miles de dilemas de ese día: ¿Nos quedábamos allí a ver si llegaban las chicas y entraban en las caravanas? ¿Nos íbamos al hotel donde se suponía que estaban rodando? Por supuesto no había uno sino tropecientos vigilantes con sus chalequitos reflectores y sus walkies controlando la zona, con lo cual no podíamos tampoco campar a nuestras anchas y menos con cámara de fotos, sobre todo la de bidai que iba con teleobjetivo. Buf, vaya marrón. En la caravana de maquillaje había movimiento pero lo máximo que vimos fue a una niña dentro -una niña que podía ser la hija de Ilene, de Jennifer Beals, de Laurel Holloman…- pero no había ninguna actriz a la vista. De todas maneras estaba claro que aquella zona debía estar controlada. Dos furgonetas no hacían más que entrar y salir del párking cargando y descargando gente, guiones, aparatos…  Si la seguíamos descubriríamos el punto exacto del rodaje, porque el hotel al que habíamos ido en busca de acción estaba muerto. 

Aprovechando que una de las vigilantes tenía más pinta de salir en la serie que de controlar nada, charlamos un poco con ella y bueno, la charla dio sus frutos. Definitivamente no estaban rodando en el hotel donde creíamos sino en una galería de arte. ¿Sería la Buschlen Mowatt donde Ilene había dejado su coche una hora atrás? Estaba claro que si nos dedicábamos a pasear por allí veríamos qué se cocía y efectivamente tras emprender el paseo bajo un sol brutal nos topamos con el set de catering situado como a unos 700 metros de donde estaban aparcadas las caravanas. Ese set de catering que ha aparecido tanto en la última temporada de The L Word, allí, en vivo y en directo.

Ya teníamos dos puntos fuertes y aún nos quedaba la galaería por investigar. Y teníamos otras dos infos de lujo que acabábamos de obtener, una buena y otra mala: 1. Lo que se rodaba ese día eran interiores -con lo cual íbamos a ver más bien poco- y 2. Las actrices que estaban por allí eran Jennifer Beals, Laurel Holloman, Marlee Matlin y Alexandra Hedison. ¡Dylan volvía a la serie tal y como Rachel Shelley le había suplicado a Ilene ;). Lo teníamos todo bastante controlado para ir de casualidad en casualidad, pero eso no significaba absolutamente nada…        

Ya sólo nos quedaba la galería de arte pero… ¿¿¿qué puerta, la de delante o la de detrás??? Porque es que para acabarlo de liar la galería, que para la serie tenía otro nombre y otros cuadros expuestos, tenía dos accesos súper vigilados.

Aquello estaba lleno de técnicos, furgonetas, peña con walkies, con cables, micros, papeles… en la parte de delante se veía movimiento pero en la de detrás había una mesa llena de copas de cóctel, furgos, y gente entrando y saliendo, incluidos los extras. Sí, a los extras, muy modernillos ellos, los habíamos visto en las caravanas de maquillaje adecentándose y ahora acababan de trasladarlos con una furgo al set, es decir a la galería… 

Iban a ser los extras que estarían en la galería haciendo bulto, tomado una copa y contemplando los cuadros.  Pero claro, Bette, Tina, Jodie… lo que se iba a rodar ese día se adivinaba: la inauguración de una exposición. ¿¿¿Pero qué iba a pasar entre ellas???…